
Llevo pensando mucho tiempo que si alguien me sorprende con cada una de sus recetas es Sandra, de La Receta de la Felicidad. Es una opinión personal e intrasferible y que no espero que compartáis, bueno si lo espero, pero no os quiero obligar.
Pero no me digáis que no os gustaría ser capaces de hacer obras de arte de este calibre… A mi me hace comer con los ojos. Sinceramente.
Y ya si saca un libro con las recetas de su blog, que para mi gusto refleja perfectamente su imagen y además te cita, pues ya es el culmen para el enamorado a un blog. Solo puedo invitaros a que sigáis su blog y os admiréis, como yo, con cada receta que SandeeA publica.
Una de las que más me sorprendió en su día fue un bizcocho de calabacín que nosotros hemos convertido en tarta, con la ayuda de un poco de trufa de chocolate. Vicio, puro vicio. Textura densa, como de brownie, dulce sin empalagar. Sorprendente.
TARTA DE CALABACIN y CHOCOLATE
Ingredientes -para 8-10 personas– :
Para los 3 bizcochos
300 g de calabacín
125 ml de aceite de oliva virgen extra
200 g de azúcar
250 g de harina
50 g de cacao en polvo
1 cucharada de levadura “Royal”. Polvos de hornear.
Para la trufa de chocolate
400 ml de nata líquida para montar
100 g de chocolate
25 g de azúcar glas
2 hojas de gelatina
Preparación:
Trituramos el calabacín con la piel, previamente lavado.
Precalentamos el horno a 180ºC.
Mezclamos todos los ingredientes en un cuenco grande hasta que quede una masa homogénea, aunque diferente a lo habitual en las masas de bizcocho. No queda lisa, sino que queda como con grumos.
Preparamos un molde de 18 cm (con su papel de hornear y untado en mantequilla) y horneamos la masa en tres veces, unos 12 o 14 minutos, para obtener las tres capas. El bizcocho no sube mucho, por eso ayuda hacerla así. Que veáis que queda bien hecha por fuera. Dejamos enfríar.
Ponemos 100 ml de nata a hervir. Retiramos justo antes de que rompa a hervir y añadimos el chocolate para que se disuelva. Mezclamos bien y añadimos la gelatina hidratada previamente en agua. Dejamos enfriar.
Batimos 300 ml de la nata durante un minuto. Añadimos el azúcar glas y montamos hasta que quede con cuerpo.
Incorporamos a la nata montada el chocolate derretido. Mezclamos con movimientos envolventes para evitar que se baje.
Ponemos la trufa en una manga y rellenamos la tarta, capa a capa. Dejamos en el frigorífico hasta que vayamos a servir. Podemos decorar con unas virutas de chocolate, como en la foto.
Sorpresas te da la vida. Pepacooks

