El “Hecho en mi cocina” de este mes va del tomate. No del de Telecinco, que por fin lo quitaron, si no del tomate del bueno.
Una de las primeras recetas que pusimos en el blog fue un salmorejo cordobés, pura base de tomate y esencial en el verano, que podría servir perfectamente para la ocasión, pero subimos esta nueva receta para que la probéis. De esta receta no tenemos procedencia, por lo que se puede decir que es propia -aunque es seguro que existen miles iguales por ahí, que nadie se ofenda, por favor-, y es la primera vez que la preparamos, pero os podemos asegurar que no será la última.
Ingredientes:
Pelamos los tomates y los cortamos en rodajas mientras en una sartén con unas gotitas de aceite de oliva tostamos los piñones y las pipas y los reservamos.
Preparación del aliño
El aliño lo trabajamos en un mortero. Será como un falso pesto -el verdadero, aceite, sal, albahaca, piñones y parmesano- adaptado para la ocasión. Ponemos aceite y albahaca -la nuestra es fresca, de la maceta de la ventana- en el mortero y comenzamos a machacar. Añadimos los piñones y las pipas tostados, un poquito de vinagre de jerez y sal y seguimos machacando hasta que la vinagreta quede emulsionada, como en la foto.
Si no tenéis pipas y piñones probar con otro fruto seco. Nueces o avellanas sin piel o incluso anacardos tostados. También tened en cuenta que el tomate se lleva gran parte de la sal de la vinagreta. Aunque la notéis salada luego bajara su sabor.
Emplatado
A cada capa de tomate que pongamos la pintamos con la vinagreta y la intercalamos una capa de ahumados.
Y así, intercalando tomate-bacalao-tomate-anchoas y pintando entre capa y capa,
terminamos con una de tomate.
Acabamos bañando con el resto de la vinagreta y ponemos los frutos secos tostados que habíamos reservado, que le darán un toque crujiente muy bueno.
Nos sirve como un primero muy fresco para ya casi finalizar el verano.