Conejo al ajillo

El conejo al ajillo o el pollo al ajillo, son de esas recetas que me recuerdan siempre a noches de verano. Con una buena fuente de patatas fritas, de esas que se hacen en bastones, despacio, y quedan tiernas, casi como confitadas. Pan para no dejar nada. Memorias deliciosas.

Por desgracia en estos tiempos de controlarnos las grasas, casi nunca preparamos ya este tipo de recetas y si lo hacemos es para darnos un capricho, en modo fiesta.

Nosotros preparamos el conejo prácticamente igual que el pollo. Pero es que queda tan bien, que no merece la pena cambiar. Ten a mano la servilleta, porque te vas a manchar los dedos. Y repito, merece la pena.

CONEJO AL AJILLO

Ingredientes -para 2 raciones– :
Medio conejo, cortado en pedazos.
5 dientes de ajo
100 ml de vino de jerez
Hierbas frescas. O secas. Tomillo, romero y laurel
10 ml de vinagre de jerez
Sal
Pimienta
Aceite de Oliva virgen extra
Tiempo de elaboración: 30 minutos

Preparación:
Cubrimos el fonde de una cazuela con Aceite de Oliva Virgen Extre y doramos los dientes de ajo, sin pelar.

Cuando empiecen a tomar color incorporamos el conejo, salpimentado, junto a los ajos a la cazuela. Añadimos también las hierbas. Si tienes frescas, separa las hojas de los tallos e incorporalas. Al gusto de cada uno. Un par de hojas de laurel aromatizarán el aceite de una manera deliciosa.

Rehogamos bien, removiendo cada poco hasta que el conejo este bien dorado. En ese momento incorporamos el vino y dejamos que reduzca para que pierda alcohol. Puedes sustituir el vino de jerez por vino blanco. El vino de Jerez siempre le dará un toque diferente.

Con el conejo dorado y el vino reducido, unos 10 o 15 minutillos, dependiendo de la cantidad, añadimos el vinagre. Unas dos cucharadas solamente. Simplemente dejamos que evapore y ya está el plato listo. Fácil y simple.

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